La fruta que se produce en la región de Extremadura se caracteriza por ser de alta calidad, presentando unas cualidades organolépticas excepcionales. Son cultivadas respetando el medio ambiente y, debido a las horas de luz de la comunidad, se consigue un gran nivel de azúcar y color en sus producciones. Dicha producción adquiere más pujanza cada año.
Durante la última campaña, en Extremadura se ha registrado una producción récord de fruta con una cosecha que ha superado las 250.000 toneladas. Extremadura cuenta con unas 20.000 has cultivadas de frutales, con predominio de las especies de hueso, en la que ha experimentado en los últimos años una importante reconversión varietal, no solo en las variedades más demandadas, resistentes y productivas, sino también en otras frutas como es el caso del albaricoque. El cultivo de la fruta de hueso se reparte principalmente en las Vegas del Guadiana y en el norte de Cáceres. En esta zona se ubican unas 7.000 has de cereza. Otras frutas que se producen en Extremadura son: nectarinas, ciruelas, melocotones, peras y albaricoques.
Extremadura muestra una clara vocación exportadora en el sector de la fruta de hueso.
Destaca además el crecimiento y la consolidación del cooperativismo dentro de la fruticultura extremeña, como es el caso de la cooperativa Valle del Jerte. En cuanto a las frutas y hortalizas frescas transformadas, se sigue luchando por este sector que adquiere cada vez más importancia, y sobre todo, está generando riqueza, valor añadido a los productos, puestos de trabajo e inversiones en plantas pioneras en la región. Aunque se trata de una de las zonas productoras más jóvenes, su objetivo diferenciador pasa por una fuerte estrategia de calidad frente a sus competidores.
Producción Integrada: Extremadura es la primera región que reguló esta materia desde el punto de vista integral, llegando hasta la fase de comercialización. Respecto a este tipo de producción, Extremadura aglutina una superficie certificada que ya está en el 82% de la fruta de hueso (Pera 60%).
En cuanto a las hortalizas de la región, destaca la producción de tomates para múltiples usos en la industria alimentaria. En la campaña 2005, la producción de tomate para industria ha sido de 2,2 millones de toneladas. Con estos datos, Extremadura es la primera productora nacional con una extensión del cultivo de 29.000 hectáreas. Se puede decir que Extremadura es la única región en el mundo en la que el cultivo del tomate ha crecido en los últimos seis años.
Otras hortalizas importantes de esta región son el melón, el pimiento utilizado para transformarlo en ‘pimentón’ o bien venderse en las fruterías como ‘ñoras’ empleado como condimento característico de la cocina española y mediterránea que, en la comarca de la Vera, ya tienen una denominación de calidad y origen propio.
La calidad de los productos extremeños surge de conjugar los procedimientos autóctonos de elaboración que se han ido perfeccionando tras siglos de tradición con las ventajas que hoy ofrecen las técnicas más modernas e innovadoras; es decir, de aplicar lo mejor del pasado y del presente a las excelentes materias primas con que les obsequia el privilegiado entorno medioambiental. El deseo de preservar estos tesoros es lo que ha llevado a la Junta de Extremadura a apostar por las Denominaciones de Origen como mecanismos de garantía avalados internacionalmente, capaces de asegurar que en la elaboración de estos productos se han utilizado las mejores materias primas y los métodos tradicionales propios de la región. Son productos reconocidos y apreciados por los paladares más expertos, que se ganan el favor de los consumidores más exigentes.
Es difícil transmitir la realidad extremeña, el espíritu extremeño o, simplemente la diversidad y calidad de sus paisajes, sus gentes, sus recursos naturales y productos, y por supuesto, su gastronomía. Una región que conserva y ofrece carácter de calidad y diversidad a todos aquellos que quieren superar lo de siempre. La enorme extensión de la región es paralela a su oferta. Aprender a disfrutar sus productos con Denominación de Origen y Específica y productos con Indicación Geográfica Protegida es uno de los aspectos más gratificantes. Ejemplo de ello son las D.O.P ‘Cereza del Jerte’ y ‘Pimentón de la Vera’.
Extremadura ofrece al visitante una generosa selección de todo lo necesario para disfrutarla.